Saber improvisar es saber adaptarse a lo imprevisto

En el teatro y en la música la improvisación es una disciplina en si misma. La capacidad de músicos y actores para salirse del guión o la partitura y aún así lograr seguir siendo coherentes está considerada como una prueba tangible de su talento. En estas disciplinas, la improvisación no está considerada como algo hecho con prisas o sin preparación sino, al contrario, como una muestra de la técnica y la creatividad de un artista, capaz de dejar que lo imprevisto haga de cada actuación algo único.Pero por supuesto para que una improvisación salga bien es necesario conocer a fondo el tema que tratamos y tener los recursos necesarios para afrontar los imprevistos con serenidad. Algo que es extrapolable al mundo de la empresa en el que saber improvisar no es hacer las cosas sin haberlas preparado sino ser capaces de poner en marcha nuestra creatividad cuando surge un imprevisto.

Nosotros te aportamos algunos consejos que pueden ayudarte a desarrollar tu capacidad de improvisar cuando sea necesario hacerlo:

 

-Planifica, pero ten en cuenta que los planes no pueden ser rígidos. Aunque por supuesto siempre que llevamos a cabo un proyecto es necesario planificar no podemos dejar que ese plan nos limite sino que sea un punto de partida para organizarnos. Si queremos seguirlo al pie de la letra sin tener en cuenta las circunstancias, que pueden cambiar en cualquier momento, nos quedaremos bloqueados siempre que las cosas no vayan tal y como habíamos previsto.

 

Presta atención a lo que sucede a tu alrededor. El buen improvisador es el que sabe adaptarse a las circunstancias sin perder de vista sus objetivos. En la música, el intérprete que improvisa lo hace a menudo siguiendo a otro músico y es importante que exista una escucha entre ambos. En el teatro, la improvisación se da a menudo entre varios actores y es importante que todos estén a la escucha para lograr que el diálogo siga teniendo sentido.

 

Prepárate. Para que la improvisación tenga éxito es importante que dominemos el tema a tratar y tengamos los recursos suficientes para afrontar lo imprevisto con serenidad y con la certeza de que podremos encontrar una solución.

 

Sé creativo. La improvisación es una excelente forma de fomentar la creatividad y cuanto más creativos seamos más fácil nos será encontrar soluciones a las situaciones que no habíamos previsto. No hagas siempre las cosas de la misma forma, atrévete a probar cosas nuevas, alimenta tu imaginación con lecturas, visitas a exposiciones, inventa un nuevo plato o haz un collage. Todo lo que estimule tu creatividad te ayudará a saber improvisar cuando lo necesites.

 

Y recuerda…

 

Improvisar no está reñido con planificar, significa ser capaces de rectificar según el curso de los acontecimientos, no quedarnos bloqueados si no podemos hacer las cosas como las habíamos previsto.

No se puede dejar todo a la improvisación. Saber improvisar no es hacer las cosas sin haberlas preparado sino ser lo suficientemente flexibles y creativos para aplicar lo que sabemos en situaciones distintas a las previstas.

Otros artículos interesantes

En Une Consultores pensamos que los departamentos de Learning & Development tienen un rol estratégico dentro de las organizaciones y esta influencia …

Recientemente, Gartner tituló con esta contundencia un fenómeno que lamentablemente nos encontramos en nuestro día a día en muchas organizaciones: “Managers Are …