Sin miedo a dar

 

Hoy, más que nunca, internet nos demuestra que si compartimos lo que sabemos todos salimos ganando. Iniciativas como Wikipedia, en la que son los propios usuarios los que crean las entradas y las corrigen si es necesario, fenómenos como la creación de software libre, al que todo el mundo puede tener acceso para utilizarlo o mejorarlo, o los foros de traducción en los que son los propios usuarios los que ofrecen soluciones, son prueba de que gracias a la cooperación todos avanzamos.

Dar conocimiento nos hace más grandes porque sólo si somos capaces de dar estaremos los suficientemente abiertos para poder, a nuestra vez, aprender de los demás. Lejos de actitudes marcadas por el miedo, hoy el mundo avanza gracias a todos aquellos dispuestos a compartir lo que saben para lograr que las cosas sean más fáciles para todos.

Algo también aplicable al mundo de la empresa, en la que muchos aun temen compartir con su equipo por miedo a perder su poder sin darse cuenta de que así renuncian también a enriquecerse con sus aportaciones y lograr, entre todos, un resultado mejor.

Precisamente, dar acceso libre al conocimiento a través de internet es el objetivo de uno de los fenómenos recientes más interesantes en la red: los MOOC, siglas en inglés de Massive Online Open Course, es decir cursos masivos, online y gratuitos. Las siglas MOOC empezaron a utilizarse en 2008 cuando los profesores George Siemens y Stephen Downs de la Universidad de Manitoba (Canadá) decidieron impartir un curso simultáneamente de forma presencial y a través de internet. Así, además de los 25 alumnos que se apuntaron para asistir en la aulas, 2.500 alumnos de todo el mundo siguieron el curso en la red.

Conocimiento libre

Hoy, universidades de tanto prestigio como Stanford o Harvard ofrecen cursos abiertos y gratuitos en internet. También varias universidades españolas y latinoamericanas ofrecen sus propios MOOC. Además de las asociadas a universidades, páginas como Khanacademy, Coursera o Novoed nos permiten acceder a MOOC de gran calidad. A través de vídeos, los profesores explican la materia y las tareas a realizar, además se facilitan todo tipo de referencias bibliográficas y contenidos. Pero sin duda uno de los puntos más interesantes de los MOOC es el hecho de que permiten una gran interacción entre iguales. Así, se fomenta la realización de tareas en grupo a través de la red y, en los foros, los alumnos plantean sus dudas y son sus propios compañeros los que las resuelven.

Los MOOC responden así a la idea de internet como un espacio en el que compartir de forma libre conocimiento, en el que todo el mundo está dispuesto a poner a disposición de los demás lo que sabe para lograr, entre todos, avanzar.

Una prueba tangible de que compartir conocimiento es la mejor forma de lograr entre todos un resultado excepcional, porque si el talento individual es importante, la suma de talentos es fundamental.

Foto: CC Giulia Forsythe Flickr

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